Durante esta semana hemos continuado conociendo mejor los buitres y otra ave que los acompaña en ocasiones: el milano real. Hemos reconocido sus siluetas y comparado el cráneo de un buitre con otros cráneos que tenemos en clase (y que han traído, la mayoría, compañeros de clase).
Hemos visto cráneos de corzo, de tejón, de jabalíes, una muela de caballo y hasta el ¡cráneo de una vaca! Hemos aprovechado para conocer tres tipos de dientes: incisivos, colmillos y molares y hemos reflexionado sobre la alimentación de los animales según esos tipos de dientes.
Además, hemos comenzado a construir un quebrantahuesos de tamaño natural. El quebrantahuesos puede llegar a tener una envergadura de 3 metros, así que lo primero que hemos hecho es preparar un papel que tuviera esa longitud y pegar otro para poder hacer el cuerpo.
A cpntinuación hemos hecho un primer boceto del quebranta, lo hemos repasado con rotulador y lo hemos recortado.
Hemos pensado que hacía falta darle consistencia, así que hemos pegado por la parte superior unos cartones. Primero hemos echado cola y luego hemos puesto los cartones con nosotros encima para poder hacer peso y que se pegue bien.
Finalmente hemos puesto un papel de estraza negro por la parte superior y dos varas, para poder darle consistencia. Ya empieza a parecer una marioneta.
Para hacer las plumas hemos necesitado conocer cómo son las plumas. Hemos conocido sus partes (cálamo, raquis y barbas) y hemos observado que hay plumas que sirven para volar (son más asimétricas y largas) y plumas que impiden que se escape el calor (con barbas más blandas), y otras que son intermedias entre las anteriores.
Tras esto hemos dibujado las siluetas, hemos pensado cómo distribuirlas y hemos comenzado a pegarlas en la cola y cuerpo del quebranta.
De momento nuestro quebranta tiene esta pinta...
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